La mentira es una forma muy poco evolucionada de engaño y el engaño evolucionado es la manipulación, hay dos maneras muy básicas de manipular:
*Convertir lo pequeño en importante.
*Convertir lo importante en insignificante.
Es decir, hacer una montaña de un grano de arena y viceversa, silenciar lo verdaderamente importante hasta que parezca que no existe, la manera de hacer lo primero es repetir diariamente una determinada información hasta que aparente ser una auténtica epidemia, el mejor ejemplo de ello es la violencia de género.
La manera de hacer lo segundo, es igual de sencilla, consiste en secuestrar información y censurarla, así como se ha hecho con la historia de Nikola Tesla o el Experimento Philadelphia.
¿Cómo descrubrir que un periodista no se cree lo que esta contando? Primero, lo notarás porque todos los medios de comuniación han repetido lo mismo, y eso es la señal de que simplemente se han limitado a repetir lo que les ha enviado la agencia de comunicación a la cual estan suscritos.
La segunda manera de descrubirlo es atendiendo al tono de su voz, lo podrás percibir claramente, uno, porque el o la periodista te cuentan la noticia con voz de película de Walt Disney, y dos, escucha el canturreo robotizado del periodista cuando lee la noticia, esa es la señal de que ha puesto el piloto automático y actua como un robot.
Si PETA se molesta cada vez que alguien mata a una mosca, me pregunto que dirán cuando se enteren que los militares están convirtiendo escarabajos en espías.
El Pentágono ha financiado un proyecto en la Universidad de Berkley en donde los científicos han implantado exitosamente electrodos y pequeñas antenas a escarabajos voladores, permitiendo a los científicos manejarlos a control remoto.
Así lo explica una de los científicos de la universidad:“Estamos metiendo dispositivos eléctricos dentro de su sistema nervioso y después activando sus músculos, para que cuanto este volando, si aplicamos un poco de presión en su músculo izquierdo, por ejemplo, esa ala se mueva más fuerte y el insecto gire”.
El Pentágono ha implantado en estos diminutos seres vivos, detectores químicos para prevenir futuros ataques terroristas. La tecnología ya ha sido probada en diferentes larvas, escarabajos y polillas.
El Pentágono ha implantado en el cuerpo de diferentes insectos un detector de armas químicas.
Hasta el momento no han logrado que los aparatos funcionen por mucho tiempo, pero ya están probando con diminutas células de energía solar para hacer a los escarabajos “sustentables”.
Personalmente no se si estoy de acuerdo con este tipo de procedimientos, pero habrá que esperar a que mejoren la tecnología y puedan implementar el sistema de una manera menos intrusiva dentro del insecto.
